PATRIA VIEJA
Los historiadores la ubican con un hecho particular: La Primera Junta de Gobierno del día martes 18 de septiembre de 1810, el cual había sido convocado por los vecinos más importantes de Santiago, quienes lograron que el antiguo gobernador, don Antonio García Carrasco, dejara el poder. Entonces en su lugar, la Real Audiencia designó a Mateo Toro y Zambrano, la cual a los vivos gritos de: ¡Junta queremos! se instaló, todavía, sólo como un resguardo al poder realista hispano representado por Fernando VII, el rey cautivo de Bonaparte.
JUNTA DE GOBIERNO
En este evento casi todos acuerdos se tomaron por unanimidad, luego de los discursos de Argomedo e Infante, Manuel Manso intentó llamar al orden, sin embargo su predica fue acallada por los gritos de: ¡Junta queremos, Junta queremos! este primer paso tuvo un gran éxito debido a que las invitaciones, en su mayoría llegaron a manos de vecinos criollos de pensamiento libertario (450), mientras que solo unas 14 cayeron en manos de realistas. Esta fue la base para decisiones apresuradas, la primera de ellas; ¡fijarle un buen sueldo a la flamante junta!, esto quedó por expreso en las siguientes palabras: "Considerando... que el día 18 del presente... resultó la instalación de una Junta Provisoria de Gobierno, a nombre de nuestro adorado monarca don Fernando VII... ; resultó la pluralidad (mayoría) por que al Sr. Presidente de la Excma. Junta se le asignasen seis mil pesos anuales, tres mil a cada uno de los señores vocales que la componen y dos mil a cada secretario". Todo aquello a sólo una semana de formada la junta. Pero ello no es todo, otro "arreglo" hecho por el Cabildo el 9 de noviembre, fue entregar la cantidad de mil pesos "para gastos de recepción del Excelentísimo Sr. Presidente, Conde de la Conquista", tal y como si nunca antes el Cabildo santiaguino hubiese visto de cerca a tan conspicua persona.
Tal como en nuestra historia reciente, la Junta marcó un antes y un después para la política y la vida social de Chile, muchos españoles sufrieron en carne propia por haber "escogido" (más bien permanecido) en el bando realista, siendo victimas de agresiones personales o objeto de escarnio por sus numerosos bienes, generalmente arrebatados a la fuerza. También comenzaron a circular, manuscritas sediciosos, Proclamas y Catecismos Políticos (Catecismo Político Cristiano) como el de Camilo Henríquez (?), u otros más decidores del hostil ambiente reinante, tal como el "Diálogo entre un español americano ilustrado (esto es, un criollo separatista) y un español europeo pata rajada" en el que, innecesario es decirlo, el peninsular recibía la peor parte.
La primera amenaza contra el nuevo gobierno se sustentó en un ataque del oficial de dragones, el señor Tomás Figueroa, quien en abril de 1811 pagó con su sangre aquel atrevimiento. En este punto yace la debilidad y la base del fracaso de la Patria Vieja, pues tras aquel fracasado golpe de estado los realistas fueron obligados a declararse chilenos, lo cual sin duda no ocurrió. Por ello en las filas del Ejercito patriota se ubicaban los criollos de familia, los "señoritos y patricios", hijos de descendientes de los primeros conquistadores, mientras que en el bando realista se ubicaban los hijos provincianos, mucho más permeables a las otras capas de la sociedad y, por supuesto, afectos a la persona del rey, pues para ellos la patria era una e indivisible con la península ibérica.
Entre tanto el conflicto avanzaba, el Cabildo santiaguino intentaban condenar y recargar con grabas a los "antipatriotas", cosa que la Junta negó en las siguientes lineas de un documento de 1813: "Contéstese al Ilustre Cabildo que deben incluirse en la contribución... no sólo los declarados antipatriotas, sino también los indiferentes, y aún aquellos patriotas que ni con sus personas ni con sus intereses, a proporción de lo que podían, han ayudado a la defensa de su patria en los apuros que ha estado y se mantiene"
Los problemas domésticos, propios de una economía independiente, desconocidos hasta entonces, se hicieron presentes; el desabastecimiento, la escacez, la improductividad rompieron con la economía, antes siempre cubierta por el halo protector de la corona, el mismo pan fue un problema, debiendo racionar tanto su producción como su consumo. Este problema fue enfrentado por Juan Antonio Valdés, quien había sido nombrado regidor por la Junta, para estos asuntos.
GOBIERNO DE JOSÉ MIGUEL CARRERA Y VERDUGO
Desde un comienzo el gobierno de Carrera dio muestras de su radicalismo y la fuerza del momento y las decisiones que surgían a partir de este hombre. Por esos años llegó la primera imprenta* a Chile, la cual fue puesta al cuidado y disposición de Fray Camilo Henríquez, quien escribió con ella el primer diario del país: La Aurora de Chile. Sumado a ello, se obligó a los conventos a funcionar como escuelas de primeras letras, a su vez que una bandera de tras franjas horizontales, azul, blanca y amarilla, junto a la escarapela de la revolución francesa (pero de los colores antes citados) se transformaban en los primeros símbolos patrios de la nueva nación.
En 1812 Carrera dio al país el primer Reglamento Constitucional de Chile.En el discurso, el Director Supremo reconocía a Fernando VII como monarca, sin embargo en los puntos expresados en la carta dejaba muy en claro que ninguna orden foránea tendría injerencia sobre el territorio, era la primera vez que se hablaba de soberanía. El ejecutivo quedaba en manos de una junta tripartita, mientras que el legislativo quedaba en manos del Congreso, compuesto de siete personas. Pero para España era inaceptable que los hechos acaecido en mayo de 1810 en Buenos Aires se repitieran también en Chile, de tal manera que se envió una fuerza expedicionaria hacia Chile, el 26 de marzo de 1813. El brigadier Antonio Pareja se apoderó de Talcahuano y después de la ciudad de Concepción, desde luego apoyado por los realistas de sur. El avance sobre Chillán le permitió a Pareja dominar toda la región hasta el río Maule. José Miguel Carrera no dudo en enfrentar al enemigo, apoyándose en Bernardo O'higgins. Las contiendas y el Sitio de Chillán sólo sirvieron para desgastar a ambas fuerzas, sin definir a un ganador. Para la Capital significó un cambio en el senado, instalando en la junta a José Miguel Infante, Agustín Eyzaguirre y Francisco Antonio Pérez. los esfuerzos de esta Junta se dirigieron a la cultura, allí donde hubiese más de 50 vecinos debían instalarse escuelas de primeras letras. Estos avances se tradujeron en la creación del Instituto Nacional (agosto, 1813), en tanto que el lugar de privilegio de la Aurora fue ocupado por el Monitor Araucano (6/4/1813) y al mismo tiempo apareció el Seminario Republicano de Antonio José Irrisarri.
En esta primera etapa se formó el Congreso Nacional, un jueves 4 de julio de 1811, el cual fue desarticulado, vuelto a levantar por José Miguel Carrera. En este trascurso, el enfrentamiento militar entre las fuerzas realistas y patriotas se transformó en algo real, sin embargo la irregularidad de los ejércitos no permitió definir a un claro ganador en combate, menos aún con las ambiguas divisiones dentro del bando patriotas, insertas por el mismo General Carrera, en desavenencia con O'higgins tras la firma del tratado de Lircay (3/5/1814). Esta infranqueable división fue la antesala de al derrota del Ejército de Carrera en Rancagua (1-2 de octubre, 1814) y de la huida de los patriotas hacia Argentina.En 1812 Carrera dio al país el primer Reglamento Constitucional de Chile.En el discurso, el Director Supremo reconocía a Fernando VII como monarca, sin embargo en los puntos expresados en la carta dejaba muy en claro que ninguna orden foránea tendría injerencia sobre el territorio, era la primera vez que se hablaba de soberanía. El ejecutivo quedaba en manos de una junta tripartita, mientras que el legislativo quedaba en manos del Congreso, compuesto de siete personas. Pero para España era inaceptable que los hechos acaecido en mayo de 1810 en Buenos Aires se repitieran también en Chile, de tal manera que se envió una fuerza expedicionaria hacia Chile, el 26 de marzo de 1813. El brigadier Antonio Pareja se apoderó de Talcahuano y después de la ciudad de Concepción, desde luego apoyado por los realistas de sur. El avance sobre Chillán le permitió a Pareja dominar toda la región hasta el río Maule. José Miguel Carrera no dudo en enfrentar al enemigo, apoyándose en Bernardo O'higgins. Las contiendas y el Sitio de Chillán sólo sirvieron para desgastar a ambas fuerzas, sin definir a un ganador. Para la Capital significó un cambio en el senado, instalando en la junta a José Miguel Infante, Agustín Eyzaguirre y Francisco Antonio Pérez. los esfuerzos de esta Junta se dirigieron a la cultura, allí donde hubiese más de 50 vecinos debían instalarse escuelas de primeras letras. Estos avances se tradujeron en la creación del Instituto Nacional (agosto, 1813), en tanto que el lugar de privilegio de la Aurora fue ocupado por el Monitor Araucano (6/4/1813) y al mismo tiempo apareció el Seminario Republicano de Antonio José Irrisarri.
*Nota: A este respecto hay informaciones disímiles, pues se supone, que tras gestiones de un comerciante sueco; Mateo Arnaldo Hoevel, habría venido a Chile desde Nueva York el 22 de julio de 1811, llegando a país en noviembre de ese año. Carrera habría llegado el 25 de julio, y no sería participe de la Junta hasta septiembre, tras su golpe. Lo que si es cierto es la compra del artefacto por Carrera, una vez instalado en el gobierno.
Fuente: http://www.auroradechile.cl/newtenberg/681/article-2886.html
https://www.youtube.com/watch?v=Ri8XG9Q-3hY CARRERA: "EL PRÍNCIPE DE LOS CAMINOS"
https://www.youtube.com/watch?v=Q5hs-BE8hh4 O'HIGGINS: "VIVIR PARA MERECER SU NOMBRE"
https://www.youtube.com/watch?v=l6ujbySu_XY RODRÍGUEZ: "HIJO DE LA REBELDÍA"
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